A
buen seguro que habréis escuchado en más de una ocasión la frase de que en Tram
somos como una gran familia, que todos estamos involucrados en un mismo
proyecto, etc, etc, pero la realidad que vivimos los trabajadores del Tram es
algo diferente.
Es
cierto que hay un buen rollo entre plantilla, mandos y dirección, que el trato
es en la mayoría de los casos amable y directo, aspecto que es de agradecer
viendo lo que se ve en otras empresas, pero no se debe olvidar en ningún
momento quienes somos cada uno de nosotros y cuales son nuestras
responsabilidades y deberes si realmente queremos hacer posible un transporte
de viajeros seguro y eficiente.
La
responsabilidad del Comité de Empresa es la de ser la voz de los trabajadores
ante la Dirección, para lo bueno y para lo malo, y ese buen rollo existente no
se debe confundir con que todo está bien como está. El Comité de Empresa no son
solo las nueve personas que lo integran en Trambaix, sino los mas de cien
trabajadores y trabajadoras a las que representa y cuando este hace una
petición a la Dirección que no es atendida, está desatendiendo a toda la
plantilla de Trambaix.
Ahora
ya no estamos hablando de reclamaciones económicas, ni de mas días de
vacaciones, ni tan siquiera de permisos, porque todo eso ya ha quedado
negociado y plasmado en el acuerdo de mejoras firmado recientemente, ahora
hablamos del día a día del trabajador del Tram que por ejemplo le pide a la
Dirección que no deje de entregar el cuadrante mensual impreso hasta que se
cambie el formato en la intranet y lo deniegan sin mas, de que solucionen de
una vez por todas el problema en las unidades que no detectan los semáforos y
no lo hacen, que el mantenimiento de las unidades sea el adecuado y las cámaras
de retrovisión como mínimo este limpias, que los problemas de enclavamientos se
solucionen y no pasen porque los trabajadores deban asumir la responsabilidad
del mal estado, que las agresiones a los trabajadores del Tram deben ser
perseguidas con el máximo rigor para resarcir a las víctimas, etc, etc.
Los
trabajadores de Trambaix, a través de sus portavoces, quieren ser una parte mas
activa en la denuncia y la solución de los múltiples problemas que tenemos día
a día y no ser meros sufridores mudos que no son atendidos en sus aportaciones
y demandas. Por esto mismo decimos a quien quiera oírnos que estamos dispuestos
a colaborar siempre que la Dirección colabore con nosotros, pero si sigue por
el mismo camino que lleva recorriendo en los últimos tiempos, la representación
de los trabajadores también dejará de colaborar y no será por nuestra culpa que
el Tram no pueda ser mejor de lo que es ahora.